Responsable: Federico José Barrero García
Tipo de Proyecto/Ayuda: OPN - Avanza I+D
Referencia: TSI-020302-2008-21
Fecha de Inicio: 29-07-2008
Fecha de Finalización: 30-06-2010

Empresa/Organismo financiador/es:

• Ministerio de Industria, Turismo y Comercio

Equipo:

• Investigadores:
  • María del Rocío Martínez Torres
  • María de los Ángeles Serrano Ochoa
  • Sergio Toral Marín

Contratados:

• Técnicos/Personal Administrativo:
  • Darío Fernando Cortés Tobar
  • Daniel Gutiérrez Reina
  • Luis Esteban Marsal Pederzani

Resumen del proyecto:

La denominada “violencia doméstica y de género” se ha convertido en uno de los principales problemas a los que se enfrenta nuestra sociedad. No entiende de fronteras, de clases sociales, de culturas, de etnias o de religiones, y es una clara violación de los derechos fundamentales del ser humano. Los hechos hablan por sí solos.

El Informe Mundial sobre la Violencia y la Salud, realizado por la agencia de Naciones Unidas denominada World Health Organization, constituye la primera recapitulación general del problema de la violencia a escala mundial. Además de las facetas conocidas de la violencia colectiva, como las guerras o los conflictos, en el Informe se examinan otros tipos de violencia tradicionalmente relegadas a un segundo plano, como la propia violencia de género. En el Informe se señala que las mujeres son las que corren más riesgos en entornos domésticos o familiares. Casi la mitad de las mujeres que mueren por homicidio son asesinadas por sus maridos o parejas actuales o anteriores (un porcentaje que se eleva al 70% en algunos países).

Aunque es difícil obtener cifras exactas debido a la falta de registros, según los datos disponibles, una de cada cuatro mujeres será víctima de violencia sexual por parte de su pareja en el curso de su vida. La mayoría de las víctimas de agresiones físicas se ven sometidas a múltiples actos de violencia durante largos periodos. En una tercera parte o en más de la mitad de estos casos se producen también abusos sexuales. En el mundo, la violencia machista hace que entre 1,5 y 3 millones de mujeres y niñas desaparezcan cada año, 1 de cada 5 mujeres puede sufrir una violación, sin contar aquellas que se puedan cometer en zonas de conflictos bélicos, 6.000 niñas "cada día" sufren mutilación genital femenina, asesinatos a mujeres por cuestiones de honor, por cuestiones de dote, etc.

En los países considerados democráticos y con un Estado de derecho, éste debe proteger y garantizar, entre otras cosas, la vida de sus ciudadanas y ciudadanos. Por ello, la lucha contra la violencia de género se ha convertido en uno de los principales ejes sociales de actuación en los últimos años en España. Entre las acciones más recientes en esta dirección cabe destacar la Ley Orgánica 1/2004 contra la violencia de género. Muchos pasos se han dado en búsqueda de soluciones, instrumentos y recursos para erradicar esta lacra. Sin embargo, y a pesar de la acción continua del Estado en pro de erradicarla, seguimos enfrentándonos al problema, como puede observarse del informe sobre el tema publicado por el observatorio contra la violencia doméstica y de género del Consejo General del Poder Judicial.  La sociedad, ante la dramática realidad cotidiana de los datos y estadísticas ofrecidos por los medios de comunicación en el tema, debe seguir dando pasos hacia la erradicacióbn total del problema.

Los objetivos del presente proyecto son:

1. La investigación y desarrollo de un novedoso sistema de localización que permita monitorizar las ordenes de alejamiento y alertar rápidamente a los implicados y a los poderes públicos para evitar algún tipo de violencia. Debido a las insuficientes soluciones que se ofrecen actualmente en el mercado para proteger a las victimas de violencia de género, pretendemos concluir este proyecto con un producto comercializable, eficaz para hacer cumplir las órdenes de alejamiento, y convertir este producto en líder y referente a nivel mundial.
2. Analizar las soluciones integrales que se actualmente a las víctimas de violencia de género para detectar sus fortalezas y debilidades y llegar a disponer de un conocimiento adecuado de la situación para poder afrontar la problemática desde un punto de vista científico.
3. Desarrollar nuevas herramientas, basadas en las TICs, de apoyo al colectivo de víctimas de violencia de género.